Cada cuatro años las parcialidades de Marcapata, provincia de Quispicanchis, trabajan hombro a hombro para cambiar el techo de paja del templo dedicado a su santo patrón: San Francisco de Asís. Esta ancestral actividad es conocida como “repaje” o “wasi cachuy”, y es una de las expresiones de cultura viva más tradicionales de Cusco. Será por eso que el 2015 esta ceremonia fue elevada a la categoría de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación. En octubre de este año, el templo logró la aprobación de su expediente técnico para su restauración, gracias a la gestión realizada por la World Monuments Fund (WMF). Más al norte, pero siempre en Cusco, la municipalidad de Maras también mereció todo un proyecto para la aplicación de un plan maestro turístico y urbano integrado a los circuitos del Valle Sagrado de Los Incas.
La WMF también estuvo vinculada a una de las mejores noticias de este año del bicentenario. El templo fortificado y el observatorio astronómico de Chankillo fue reconocido por la Unesco como Patrimonio Mundial. Como se sabe, la WMF ha contribuido en la conservación de este sitio arqueológico desde hace 11 años y participó en la formulación del expediente de nominación para la Unesco. Gracias al apoyo de la Fundación Selz y del Fondo del Embajador de la Embajada de EE. UU., la WMF, en alianza con el Instituto de Investigaciones Arqueológicas-IDARQ, ha logrado la conservación integral de cinco de sus torres y actividades preventivas en las ocho restantes. Siempre en Casma, la WMF obtuvo el Fondo del Embajador de la Embajada de EE. UU. para el proyecto de ‘conservación de las litoesculturas de Cerro Sechín’, dirigido por la arqueóloga Mónica Suárez, e Ingrid García, experta en conservación de piedra.
Además de la restauración del Museo de Arte de Lima, la Quinta Presa y el Parque de Exposición, la WMF cerró el año con una gran noticia: el nombramiento de Elías Mujica Barreda como director ejecutivo de la oficina en Perú. Mujica es conocido por sus experiencias en la gestión y desarrollo del patrimonio cultural y natural con inclusión social, la transformación del territorio y el desarrollo de tecnologías tradicionales.
El dato
MALI. La oficina de WMF también inició en agosto las obras del ‘Proyecto de Restauración de la Fachada del Museo de Arte de Lima MALI en Conmemoración por el Bicentenario del Perú’
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