La noche del último domingo 27 de diciembre murió el suboficial de la Policía Nacional del Perú, Carlos Girón Claros, quien el pasado 19 de diciembre resultó gravemente herido tras un accidente vehicular a la altura de Puerto Viejo, distrito de Chala, provincia de Caravelí. Ese día, el patrullero en el que viajaba junto con sus colegas chocó violentamente contra un tráiler.
Tras el accidente, su familia denunció que esperó casi un día para que Carlos Girón pueda recibir atención médica.
Cuando el accidente ocurrió, su familia viajó hasta Caravelí. Primero intentaron llevarlo al hospital de Camaná, pero por la gravedad de sus heridas lo derivaron a Arequipa.
Al llegar a la ciudad, intentaron atenderlo en la Clínica San Juan de Dios, pero les informaron que el SOAT del vehículo patrullero de placa EPF-475, donde viajaban al momento del siniestro, no estaba operativo. “Mi hermano ha esperado horas en esa clínica para que lo atiendan, ¿Cómo es posible que la Policía no pueda renovar los SOAT de sus vehículos?, nosotros hemos tenido que pagar los primeros gastos”, indicó la hermana del policía la semana pasada.
El agente tuvo que, finalmente, ser derivado al Hospital Honorio Delgado, donde la familia también denunció una falta de atención oportuna. Allí, los médicos indicaron a sus familiares que solo debían esperar su muerte.
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